Inmediato a la villa, y oculto en el fondo de un espeso bosque, vivía a esta sazón, en una pequeña ermita dedicada a San Bartolomé, un santo hombre de costumbres piadosas y ejemplares, a quien el pueblo tuvo siempre en olor de santidad, merced a sus saludables consejos y acertadas predicciones.
"Nelle vicinanze del borgo, nascosto in fondo a un fitto bosco, viveva in quel tempo, in un piccolo eromo dedicato a San Bartolomeo, un sant'uomo di costumi pii ed esemplari, che il popolo teneva in odore di santità, grazie ai suoi salutari consigli e alle sue accertate profezie".